18/2/14

The Smiths - Please, please, please...

Ayer, estando la mar de aburrida en el gimnasio (ese sitio que piso bien poco aunque mi conciencia me diga que debería visitarlo más), el aleatorio de mi reproductor quiso que sonase una de esas canciones que me estujan en el corazón y que puedo oír en un bucle infinito. Y aunque es tristona y lenta, y no pegaba nada con lo que estaba haciendo, la escuché una y otra vez hasta que terminé mis ejercicios. (He de confesar y confieso, que me encanta Morrisey).


Good times for a change
See, the luck I've had
Can make a good man
Turn bad

So please please please
Let me, let me, let me
Let me get what I want
This time

Haven't had a dream in a long time
See, the life I've had
Can make a good man bad

So for once in my life
Let me get what I want
Lord knows, it would be the first time
Lord knows, it would be the first time

6/2/14

De bibliotecas y otras cosas


La vuelta a Nunca Jamás ha sido también la vuelta a la biblioteca. Empecé a ir con 9 años y han sido pocos los periodos en los que he dejado de hacerlo. Recuerdo que llegó un momento en que había leído todos los libros de la zona infantil y juvenil (bueno, todos, todos, no; pero casi todos sí, por aquel entonces no era un sitio muy grande), y la bibliotecaria me ayudó a elegir mi primer libro de la de adultos. Ahora las bibliotecarias no se levantan de su mesa, pero la que había en aquella pequeña biblioteca de mi infancia incluso me ayudó a hacer los deberes alguna vez (sí, era una niña repelente que hacía la tarea del colegio en la biblioteca con 1o u 11 años).
La cosa más graciosa de todo esto es que el culpable de ese hábito fue mi hermano pequeño, que un buen día se empeñó en que nos teníamos que hacer socios, cosa a la que mis padres accedieron encantados, y eso que por aquel entonces creo que había que pagar una cuota anual de unas 500 ptas. (ainsssss, demasiado tiempo sin escribir esta abreviatura). Total que le duró la fiebre dos semanas y no volvió a aparecer por allí, de hecho creo que habrá leído un máximo de 10 libros en toda su vida...
Fui yo la que poco a poco llevé a casi todas mis amigas del colegio a la biblioteca, la que las animaba a que se hiciesen socias para leer los mismo libros, para hacer la tarea juntas, incluso para quedarnos encerradas en el ascensor (esto sólo pasó una vez, pero niños, no salteís dentro de los ascensores).
Es verdad que ahora la uso más como videoclub, porque como muchos tengo la fiebre del libro, y me encanta comprarlos (tengo una cantidad vergonzosa sin leer). Pero eso no quita que de vez en cuando coja algo, sobre todo novelas gráficas.
Un día encontré el recibo de otro lector. Me pareció gracioso ver quien más había cogido prestada aquella película, un desconocido con el mismo gusto que yo. Y fue todovía más curioso cotillear qué otras cosas se había llevado. Desde entonces, cada vez que gojo algo de la biblioteca tengo la ilusión de encontrar un recibo ajeno y, de hecho, he empezado a "olvidarme" los míos. El otro día me llevé El nombre de la rosa (en italiano), y descubrí que dos meses antes un tal señor Bozzano lo tuvo en sus manos, y junto a él, nada más y nada menos que La coordinación en el fútbol: una nueva propuesta de ejercicios de entrenamiento. De lo más interesante, ¿no? 
Y estando en estas "tontás", intentando sonreír con las pequeñas cosas de la vida, ha sucedido el milagro: tengo trabajo. Y por si eso no fuera suficiente, por fin voy a ejercer la profesión para la que me diplomé hace ya más de 7 años, cosa que sinceramente no esperaba (y por eso estoy estudiando otro grado). Todavía no me lo creo y estoy esperando que me llamen para decirme que es una broma de la radio. Pero me estoy empezando a convencer de que estas cosas también pueden pasarme a mí. Y si me pasan a mí, pueden pasarle a cualquiera. Así que, por favor, sigan soñando, sigan luchando por lo que quieren, algún día se hará realidad.

1/2/14

El lobo de Wall Street


Boyero dice que es una "comedia bárbara" y yo estoy de acuerdo. Creo que esta película tiene dos caras: lo que vemos es desenfreno, locura, diversión, sexo, drogas, dinero... Vemos a un tío que salió de la nada y creó un imperio que le hizo muy muy rico. Lo que no vemos es todas las personas a las que estafó, la avaricia, las consecuencias de la droga, la destrucción personal y familiar...
Pero la verdad es que para mí la historia es un reflejo del mundo actual, donde lo que manda es el dios dinero y, si lo tienes, nada muy malo te puede pasar porque siempre vas a encontrar otras personas incluso más codiciosas que tú, más hambrientas de dinero, que te van a "ayudar".
Por cierto, DiCaprio espectacular, como siempre.